Reseña de Antes de que los Cuelguen de Joe Abercombrie

Joe Abercrombie ha ganado su lugar en el panteón de la fantasía moderna con su trilogía La Primera Ley, y «Antes de que los cuelguen», el segundo libro de la saga, es un testamento de su destreza narrativa. Esta novela no es solo una continuación de lo que comenzó en «La voz de las espadas», sino una profundización en los abismos más oscuros del alma humana, donde los héroes están manchados de sangre y los villanos encuentran redención en sus propios términos.

Es una obra que desafía las convenciones, que desgarra las ideas tradicionales de heroísmo y maldad, para entregarnos una historia donde la moralidad es tan relativa como el poder.

Sinopsis breve

«Antes de que los cuelguen» sigue tres tramas principales que, aunque aparentemente separadas, se entrelazan en un tapiz de desesperación, violencia y búsqueda de sentido en un mundo que se desmorona. En la primera, Sand dan Glokta, el torturador y exglorioso soldado, ahora prisionero de su propio cuerpo destrozado, se enfrenta a la titánica tarea de defender la ciudad de Dagoska de un inminente asedio Gurkish. Pero la verdadera batalla no está en las murallas de la ciudad, sino en los oscuros corredores de la política, donde cada alianza es frágil y cada palabra es una daga en la espalda.

Por otro lado, Bayaz, el Primer Mago, lidera a un grupo tan disfuncional como letal en una misión suicida para recuperar un artefacto antiguo que podría cambiar el destino del mundo. Junto a él viajan Logen Nuevededos, un bárbaro con una reputación temible; Jezal dan Luthar, un joven noble que enfrenta sus propios demonios; y Ferro Maljinn, una fugitiva consumida por la venganza. Su travesía es tan épica como devastadora, revelando que el camino hacia la salvación está pavimentado con traiciones y sacrificios.

Finalmente, el ejército de la Unión, comandado por el mariscal Burr, se adentra en las frías tierras del norte para enfrentarse a Bethod, el rey de los norteños. Aquí, el coronel West se enfrenta no solo a las batallas en el campo, sino también a las tormentas internas que amenazan con consumirlo. La guerra se convierte en un espejo donde cada personaje debe confrontar lo peor de sí mismo, en una danza mortal donde no hay vencedores, solo sobrevivientes.

La fuerza de la novela: Los personajes

Joe Abercrombie brilla en la creación de personajes complejos, moralmente ambiguos y profundamente humanos. En «Antes de que los cuelguen», esta habilidad se despliega en su máxima expresión.

  • Sand dan Glokta: Quizás el personaje más memorable de la trilogía, Glokta es el epítome del antihéroe. Abercrombie nos presenta a un hombre destruido físicamente, pero cuya mente es tan afilada como las cuchillas que maneja. Su sarcasmo y amargura son una máscara que esconde un profundo dolor y una lucha constante por mantener su humanidad en un mundo que lo ha deformado. En Dagoska, Glokta se mueve en un terreno pantanoso de intrigas políticas, donde cada decisión es una apuesta mortal, y cada aliado podría ser un traidor en potencia. Su arco narrativo es una exploración sombría de la supervivencia, el poder y la corrupción.
  • Logen Nuevededos: Logen, conocido como el Sanguinario, es un guerrero marcado por la muerte y la violencia. Su lucha interna es tan feroz como las batallas en las que participa, oscilando entre el deseo de cambiar su destino y la aceptación de su naturaleza brutal. En la travesía con Bayaz, Logen se convierte en una figura trágica, un hombre que anhela la paz pero cuya vida está inexorablemente ligada a la guerra. Abercrombie utiliza a Logen para explorar temas de redención y fatalismo, mostrando que incluso los más terribles pueden buscar la redención, aunque esta siempre parezca inalcanzable.
  • Jezal dan Luthar: El joven y arrogante noble que conocimos en el primer libro empieza a mostrar capas más profundas en esta entrega. Jezal es el personaje que más evoluciona, enfrentándose a las duras realidades de la vida lejos del lujo y el confort. Su viaje es tanto físico como emocional, un camino de autodescubrimiento que lo obliga a cuestionar sus valores y su lugar en el mundo. Abercrombie maneja con maestría este desarrollo, haciendo de Jezal un ejemplo de cómo las circunstancias pueden forjar o destruir el carácter.
  • Personajes secundarios: El elenco de personajes secundarios, desde Ferro, la implacable y vengativa guerrera, hasta el pragmático West, agrega riqueza a la narrativa. Cada uno aporta su propia perspectiva al conflicto, y sus historias individuales refuerzan los temas principales de la novela. Abercrombie no deja que ninguno se quede en el fondo; todos tienen su momento bajo el foco, contribuyendo al tejido narrativo de manera significativa.

Estilo Narrativo: Antes de que los Cuelguen

La prosa de Abercrombie es directa y sin concesiones, una bocanada de aire fresco en un género que a veces se pierde en florituras innecesarias. Su estilo está marcado por un tono mordaz, con un humor negro que atraviesa incluso los momentos más oscuros. Este enfoque crea un contraste fascinante entre la brutalidad de las acciones y la ligereza de las palabras, manteniendo al lector enganchado en una montaña rusa emocional.

Abercrombie no teme mostrarnos el lado más crudo de sus personajes y del mundo que habitan. Las descripciones de las batallas son viscerales, casi táctiles, haciendo que cada golpe y cada herida se sientan reales. Pero más allá de la acción, lo que realmente destaca es su capacidad para profundizar en la psicología de sus personajes, explorando sus miedos, deseos y contradicciones. Esta es una novela que se deleita en la complejidad de la condición humana, donde las respuestas fáciles no existen y cada decisión tiene un precio.

Temáticas Principales

«Antes de que los cuelguen» es una exploración sin concesiones de la moralidad en un mundo donde las líneas entre el bien y el mal se han desdibujado hasta desaparecer por completo.

  • Ambigüedad moral: Abercrombie nos lleva a un lugar donde los héroes tradicionales no tienen cabida. Aquí, cada personaje es un reflejo de la ambigüedad moral que define este mundo. Glokta, Logen, Jezal y los demás no son ni buenos ni malos en el sentido clásico; son seres humanos con todas sus complejidades y contradicciones. Esta ambigüedad no solo enriquece la narrativa, sino que también desafía al lector a cuestionar sus propias concepciones del bien y el mal.
  • Violencia y poder: La violencia es omnipresente en la novela, no solo como un medio de supervivencia, sino como una herramienta de poder. Abercrombie no romantiza la violencia; la presenta en toda su crudeza, mostrando sus efectos devastadores tanto en los cuerpos como en las almas de sus personajes. El poder, en todas sus formas, es otro tema central. Ya sea el poder político, militar o personal, Abercrombie lo explora con una mirada crítica, revelando cómo corrompe y destruye a quienes lo buscan.
  • Desesperanza: Aunque hay momentos de humor y camaradería, el tono general de la novela es de una desesperanza palpable. Los personajes luchan en un mundo que parece diseñado para quebrarlos, y aunque algunos logran pequeños triunfos, estos son a menudo fugaces y llenos de amargura. Esta atmósfera pesimista es una marca registrada del grimdark, y Abercrombie la maneja con una destreza que pocos autores pueden igualar.

Comparación con el Primer Libro de la trilogía

Si bien «La voz de las espadas» estableció las bases del mundo y presentó a los personajes, «Antes de que los cuelguen» lleva la historia a nuevas alturas (o quizás, mejor dicho, nuevas profundidades). La narrativa se vuelve más densa y oscura, reflejando el endurecimiento de los personajes a medida que enfrentan desafíos cada vez más desalentadores. Donde el primer libro se centraba más en la construcción del mundo y en introducirnos a las personalidades de los protagonistas, esta segunda entrega se adentra en las consecuencias de las decisiones tomadas y en los costos personales de la guerra, la traición y la supervivencia.

Abercrombie también mejora en la ejecución de las escenas de acción, que en «Antes de que los cuelguen» son más intensas y están mejor orquestadas. Las luchas internas de los personajes se reflejan en las batallas externas, creando un paralelismo que añade profundidad a la narrativa. Sin embargo, algunas tramas, como la de Bayaz y Logen, pueden sentirse menos satisfactorias, lo que podría decepcionar a algunos lectores que esperaban un clímax más contundente.

Conclusión de: Antes de que los cuelguen

El libro es una obra maestra del grimdark, una novela que desafía las convenciones del género de fantasía y ofrece una visión oscura y compleja del poder, la moralidad y la supervivencia. Abercrombie se consolida como uno de los grandes narradores de nuestro tiempo, capaz de crear personajes que son tan humanos como inolvidables, y un mundo que, aunque brutal, es terriblemente realista.

Esta novela no es para los débiles de corazón, pero para aquellos dispuestos a enfrentarse a la oscuridad, «Antes de que los cuelguen» ofrece una experiencia literaria profundamente gratificante. Es un viaje a las profundidades de la naturaleza humana, donde la esperanza es escasa, pero la lucha por la supervivencia es tan feroz como inquebrantable. Una lectura imprescindible para los amantes de la fantasía más oscura y realista, y un recordatorio de que en la guerra, en el poder, y en la vida, no hay respuestas fáciles.

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